Actualmente se fabrican de piel fina, siguiendo los modelos de los artefactos extranjeros y del interior de la República, carteras, portafolios, billeteras, bolsas de mano, monederos y cigarreras, estuches, zapatos y otras curiosidades de uso personal. Se urde la hamaca en un bastidor que consta de dos largos palos de madera, cilíndricos y perpendiculares, colocados paralelamente uno enfrente del otro, que se rodean en forma de madeja con el hilo que se va a utilizar para el tejido, y con una aguja labrada en madera o hueso comienza la tejedora a entrecruzar los hilos y poco a poco se va formando la trama de malla característica. Los famosos árboles de la vida, oriundos de Metepec, Estado de México, son considerados una verdadera maravilla, incluso para artistas y artesanos ya consagrados en territorios sumamente lejanos como Europa, Asia y el Medio Oriente.
La artesanía Mexicana también proyecta otras culturas a parte de la Europea, un ejemplo sería la Talavera Poblana, la cual es una mezcla de influencia en diseño español e indígena. Los objetos creados de manos de los artesanos nos brindan el sueño de viajar a las culturas antiguas, además de que representan la diversidad cultural del país y por supuesto la creatividad de nuestros pueblos. Las piezas de barro, previo al proceso de quema se pulen y bruñen para dar como resultado las bellas y populares artesanías que los turistas tanto buscan y atesoran.
Como un alfarero lo comentó “El barro es muy noble” y no dudamos que con la pasión con la que elaboran cada pieza merezca ser reconocido como una importante artesanía mexicana. La miel, los bordados y los artículos hechos de henequén son algunos de los productos que podemos encontrar en Yucatán, pero el hurdido de hamacas es un arte que existe desde tiempos inmemorables cuya formación de una purple nos da como resultado la mejor forma de descansar. Al entrar a Metepec verás estos colores y te perderás en su mercado artesanal donde simplemente no sabrás qué objeto o árbol elegir pues todos representan el trabajo y dedicación de las familias alfareras y por supuesto por su gran belleza. Lucas Cantú y Carlos H. Matos son los fundadores de Tezontle, un estudio ubicado en el centro de la ciudad que oscila entre los mundos de la escultura y la arquitectura, con el objetivo de producir una variedad de obras en distintas escalas y materiales locales. La producción artesanal de esta tradicional prenda data del año 1764, en Santa María del Río, San Luis Potosí, como necesidad de las mujeres por tener una prenda para cubrir sus cabezas al entrar a los templos. La talavera es de las pocas (o tal vez la única) artesanías que cuentan con condiciones para reglamentar su oficio.
La mayoría de los artesanos no tienen un entrenamiento de escuela en la elaboración de las mismas, sino que aprendieron de forma empírica de generación a generación. Espero que te haya gustado este listado y como dicen por ahí “Los mejores productos son los que tienen alma y esfuerzo” por eso llévate un pedacito de México con alguna de éstas o de las muchas otras creaciones que nos ofrecen nuestros pueblos artesanos. En pocos lugares de América existe el ámbar y el de Chiapas es uno de los más bellos porque puede llegar a tener hasta forty colores de fina transparencia, además de que en este destino su tallado es handbook logrando también ser una de las magníficas artesanías hechas en México.
Siendo emblemático de los estados de Nayarit, el norte de Jalisco y una que otra zona de Zacatecas, el arte huichol se ha convertido en parte del patrimonio cultural de México, siendo un trabajo demandado por los artesanos locales, quienes se encargan de crear extravagantes obras muy coloridas, hechas de chaquira tejidas con estambre tsikurite. Gracias a las riquezas minerales con las que cuenta México, los artesanos pueden elaborar todo tipo de joyas hechas a base de oro, plata y piedras preciosas como el ámbar o la jadeita e incluso pueden trabajar en el diseño de diversos modelos de alhajeros para resguardar las prendas. Lo interesante de estos elementos artesanales es que, en algunos pueblos, como los es San Antonio Arrazola, existen talleres que le brindan al público la opción de conocer cómo es el proceso de fabricación de estas piezas exóticas y llamativas, pudiendo disfrutar de sus colores intensos y estilos únicos. Nuevas creaciones de las manos de artesanos de San Bartolo Coyotepec, Oaxaca, llegan a nuestra plataforma y galerías.
Lo basico se agrega pedacería del vidrio a la mezcla. El vidrio soplado en molde se hace con vidrio de desperdicio a muy alta temperatura hasta que se hace líquido, se toma una parte en tubos de acero y se va soplando dentro de moldes, hasta conseguir la consistencia deseada.