En Santa Ana del Valle puedes visitar los talleres donde se elaboran y venden las hermosas piezas, así como su iglesia del siglo XVIII y un pequeño museo arqueológico. Las piezas artesanales de Teotitlán del Valle son teñidas naturalmente con las partes de algunas especies vegetales y animales. El colorante principal utilizado proviene de la grana cochinilla o cochinilla carmín, un insecto que parasita las plantas de nopal, dándole un colour rojo carmesí.
Finalmente, comenzaron a crear artesanías, algunas de las cuales conllevan un valor religioso o representan alguna leyenda indígena. Al llegar la industria, los maestros artesanos perdieron mercado; dejaron de elaborar utensilios de cocina y se dedicaron a la juguetería. Después sus juguetes se quedaron sin compradores y recurrieron a los “santeros”, representaciones de santos de la Iglesia católica. Los huipiles de gala están bordados con hilos de varios colores representando motivos como flores, animales, hojas y otros elementos relacionados con la flora, fauna y cultura de la región.
Es uno de los más coloridos y variados de México, convirtiéndose en un referente nacional e internacional en este tipo de establecimiento. Se encuentra en la esquina de las calles Ignacio Zaragoza y JP García, en el centro de la ciudad. Cuenta con 30 tiendas donde se exhibe lo mejor del arte in style oaxaqueño, incluyendo alebrijes, textiles, cerámica, bordados y tapetes. Botello cuello largo 38cm hecho con barro por el artesano Matías Reyes.Todos nuestros productos son hechos a mano, por lo que se pueden encontrar algunas variaciones de diseño y/o color…
Los variados productos de barro verde vidriado elaborados por los artesanos alfareros de esta comunidad son emblema de la hermosa cerámica de los Valles centrales de Oaxaca. Estas artesanías son originarias de San Marcos Tlapazola, donde el estilo terracota se ha ido adaptando para conseguir diferentes intensidades de shade rojo. La alfarería de San Marcos Tlapazola se vende tradicionalmente en el mercado de Tlacolula, aunque también se puede encontrar en la ciudad de Oaxaca. Los animales son el tema más común para la elaboración de estas artesanías que los habitantes de la región utilizan para sus fiestas tradicionales. Tigres, panteras, leones, conejos y toros son los motivos favoritos de los artesanos, aunque también se encuentran máscaras con rostros humanos. La vestimenta típica masculina es pantalón negro, camisa blanca y poncho rojo decorado de manera comparable al huipil de la mujer.
Si bien se desconoce con precisión el origen del trabajo con hojalata, se cree que los antiguos zapotecas y aztecas elaboraban piezas con este materials, como brazaletes y collares para los guerreros, y desde entonces ha pasado de generación en generación. El traje típico para los hombres es pantalón y camisa blanca de manga larga, además de un sombrero de palma. Los caballeros portan 2 paliacates (una especie de pañuelo), uno atado al cuello y el otro en una mano. En la ciudad de Oaxaca y otros pueblos del estado, es típico ver a las mujeres indígenas cargando a sus bebés y niños pequeños en chales, una prenda ancha y rectangular que proporciona un medio cómodo y práctico para transportar a los niños. Esta línea artesanal también incluye delicados belenes navideños, payasos y otras representaciones. Las miniaturas han sido parte de la cultura mexicana desde la época precolombina, cuando los indígenas recién nacidos recibían obsequios en pequeña escala de los principales objetos relacionados con su trabajo futuro.